
Hay días en los que tu timing del día no acaba siendo como tenías planeado. Surgen imprevistos en el trabajo, en tu trayecto de un lugar a otro, o en decenas de otras cosas que se pueden escapar de tu control. De repente te encuentras con que, el tiempo con el que creías que contabas para hacer x cosa, se ha reducido, pero quieres seguir llegando a todo.
Para días así, te he preparado un ejercicio con 4 pasos para que puedas reconducir tu día, y mantener la productividad suficiente para sentirte bien contigo mismo.
Con estos 4 pasos podrás encauzar mucho más fácilmente los días de este estilo.
¡Nos vemos la semana que viene!
Nora.